PROPIEDAD:
Este atractivo y luminoso chalet con un hermoso jardín y vistas al mar, se encuentra a sólo 5 minutos en coche del pueblo de Altea la Vella y 15 minutos del casco urbano de Altea.
La casa tiene una hermosa entrada principal y un gran espacio de aparcamiento para varios coches.
Desde el hall de entrada se accede al salón con chimenea, donde también se encuentra una moderna cocina abierta totalmente equipada con electrodomésticos de alta gama. Desde el salón se puede acceder a una terraza cubierta que tiene bonitas vistas al jardín, al mar y al parque natural de Sierra Helada. La escalera exterior conduce a la terraza inferior y al pintoresco patio con encanto. En la planta principal también hay dos dormitorios, un baño separado con ducha y un amplio dormitorio principal con baño en suite. En el sótano de la villa hay dos dormitorios, un baño separado, un gran dormitorio principal con su cuarto de ducha, un lavadero funcional, un trastero muy amplio y un espacio para el descanso con acceso al patio mediterráneo con una fuente en el medio. Cerca del patio hay una zona chillout con una bonita piscina con iluminación nocturna y una terraza cubierta con cocina de verano y barbacoa. El resto de la parcela lo ocupa un hermoso jardín paisajístico. La villa está equipada con calefacción central, armarios empotrados y aire acondicionado en cada habitación. No se pierda esta oportunidad única de comprar una casa perfecta en una ubicación ideal.

ALTEA:

Categorizado como uno de los pueblos más bonitos de España y de la Costa Blanca, se encuentra a la orilla del mar Mediterráneo alzándose poco a poco en una colina formando magníficos callejones con casitas blancas bañados por el azul del mar.

Altea está llena de vida y hay mil cosas que puedes hacer. Desde disfrutar de aventuras y experiencias en la playa como vela, snorkel, submarinismo o rutas de montaña hasta aprovechar toda la oferta cultural que ofrece el municipio, como pequeños conciertos al aire libre, exposiciones, mercadillos y mucho más.

Es un pueblo perfecto, tanto para vivir como para pasar unas vacaciones y disfrutar de un día a día muy agradable. De sus restaurantes se desprende la esencia de la auténtica comida mediterránea.